Inicio / Especiales / “El Magusto es disfrutar viendo en primera fila a la gente mayor, siempre al pie del cañón”
Por Esmeralda Torres
29 September 2019
Llegó a la alcaldía de manera accidental y repitió experiencia ante el compromiso de dotar a su pueblo de una residencia de ancianos. “Estas últimas elecciones me he vuelto a presentar pero no me preguntes por qué”, se adelanta con una sonrisa. Agustina Grande (Carbajo, 1970) encara su cuarta legislatura con el reto demográfico como asignatura pendiente.
- Aunque no sean completas es su cuarta legislatura. Si sumamos los días no nos salen cien después…
- Son cien días después de la última toma de posesión, que sirven para darte cuenta de que muchas veces hay que seguir trabajando y luchando por el pueblo, y siempre con el objetivo de que localidades como ésta no desaparezcan.
- Es decir, que la despoblación es uno de los retos de esta legislatura.
- Sin duda.
- ¿Qué líneas pretende encauzar para frenarla?
- Nosotros tenemos confianza en la residencia. Se va a empadronar una familia entera; es decir, que una familia entera viene gracias a que a la madre le han hecho un contrato de trabajo en la residencia, un proyecto de la anterior legislatura. Tenemos confianza, esperamos que por esta residencia afiance nuestra población y traiga más de fuera porque cuando esté al completo generará 25 puestos de trabajo fijo, y yo no tengo tanto personal aquí para eso. Tendremos que tirar de la gente de fuera. La residencia es muy importante, y a día de hoy da trabajo a ocho personas del pueblo de manera indefinida. Gente que tenía la idea de marcharse y gracias a esta oportunidad continúan en el territorio. Algo que ha hecho que tengamos entre nueve y diez alumnos en un colegio que hace unos años tendía a desaparecer.
- Nos encontramos en la falda de la Sierra de Carbajo, entre la Sierra de San Pedro y los riberos del Tajo. Supongo que este enclave natural, dentro del Taejo Internacional, será el principal reclamo turístico del municipio…
- Bueno… Necesitaríamos que el Taejo Internacional generase más puestos de trabajo. En este sentido no estamos sacando provecho ninguno. Y también porque hay muchas cosas que nos las están prohibiendo, tenemos muchas prohibiciones. Por el tema turístico, pues sí. Antes se nos conocía mucho por el queso, ahora también por el festival El Magusto. Los recursos naturales nos ayudan, sobre todo porque gracias a ellos tenemos una aceite maravillosa, una miel deliciosa,… Un poquito de todo para ser tan pequeño.
- Es cierto, que regentan una empresa que ha conseguido producir el mejor queso del mundo. ¿Cómo ayuda esto a que el viajero se anime a venir hasta Carbajo?
- Esta marca de quesos es muy conocida a nivel internacional, y no hay quien pase por aquí que no se anime a probar el queso de Carbajo. Pero tenemos muchísimos más recursos gastronómicos, como el cocido típico extremeño que damos a probar durante El Magusto o la caldera de ciervo, que es otro de los platos de la gastronomía extremeña.
- También ha señalado la miel y el aceite.
- Eso es. Son productos ecológicos. Aquí cada una coge su aceituna, la muele y recoge su propio aceite de la almazara. Es un aceite totalmente ecológico que no lleva nada de químicos, y sabe que ummm…(ríe).
- Este espectacular enclave, a los pies de la sierra, le hará tener también alguna propuesta senderista interesante…
- Sí, claro que sí. Tenemos rutas que ascienden y descienden por nuestra sierra. Cuando más las frecuentan es durante el festival y durante la berrea. Por aquí pasa mucha gente ahora, en este tiempo, por el tema de la berrea.
- Hablemos de Cultura, Agustina. Si alguna actividad cultural protagoniza el calendario de Carbajo es El Magusto. ¿Cómo surgió este festival?
- A raíz de una asociación y como un día de disfrute. El día del magusto, el 1 de noviembre, es el día en el que nos vamos a tomar las castañas al campo. Pues un día de magusto, hace 16 años, un grupo de amigos decidió traer a Los Niños de los Ojos Rojos pero para su disfrute, nunca pensaron que esto iba a llegar donde ha llegado. Al ver la repercusión que tuvo entre todos los vecinos, siguieron al año siguiente provocando que empezase a venir gente de fuera y hasta hoy. En la actualidad es una asociación cultural que lucha muchísimo para que se mantenga este festival, porque cuesta mucho mantenerlo. El ayuntamiento le ayuda con el tema logístico facilitándole a los operarios municipales, la mancomunidad le proporciona el escenario portátil, y así. La verdad es que es un esfuerzo muy grande. Como a mí me gusta decir siempre, es el esfuerzo de una asociación y el apoyo de un pueblo entero que se vuelca y hace lo que haya que hacer.
- ¿Cómo se involucra el pueblo? Y lo más importante, ¿qué deja El Magusto en el pueblo?
- Si te digo la verdad, en el pueblo quizá sea donde menos deje. Pero sí que se nota a nivel comarcal. Nosotros tenemos un problema contra el que vamos a luchar y es el tema del alojamiento: tenemos poco alojamiento y el público tiene que dormir o en tiendas de campaña o en los pueblos de alrededor. La satisfacción de El Magusto es que se nos va conociendo por todos los sitios. Para nosotros es un día precioso y que disfrutamos, porque El Magusto es disfrutar cuando miras al escenario y ves en primera fila a la gente mayor, siempre al pie del cañón. La gente joven, por su parte, ayuda cada uno como puede: atienden en la barra, ayudan a llevar cerveza, etc.
- El Magusto es la gran cita pero imagino que Carbajo, en su día a día, también tendrá pequeñas actividades para sus vecinos.
- El día a día en materia de cultura es complicado porque es un pueblo muy pequeño. Somos poquita gente pero todo lo que viene se aprovecha. Es cierto que en verano tenemos más cositas, y que con el festival se programan otras actividades más allá de los conciertos, como la ruta, la tirolina o los talleres de folklore.
- Si viniese por primera vez a Carbajo, ¿qué tengo que ver y probar en un día?
- En primer lugar te mandaría a que te dieses una vuelta por la sierra porque este entorno es espectacular. Después a que pruebes la miel y el queso, e incluso que visites la granja de caracoles. Y en definitiva, que estés entre nuestros vecinos porque en Carbajo somos gente muy cercana y a todo el que llega lo hacemos sentir como en su casa.
EN UN MINUTO
Un paisaje cultural: El Magusto.
Un paisaje natural: la Sierra de Carbajo.
Un sabor que recomendar: el aceite.
Un color de un paisaje: el azul del cielo.
Un libro para un viaje largo: el que cuenta la historia de mi pueblo.
Una canción para conducir: la que tararean los quintos, que dice “Adiós Carbajo del alma, me voy pero no te olvido.
Una postal: la de Carbajo.